¿Os gustaría saber mi opinión sobre algunos aspectos de China que me llaman la atención? Soy una española viviendo en Shanghái y, aunque he aprendido muchísimo sobre China y su gente, creo que casi cada
¿Os gustaría saber mi opinión sobre algunos aspectos de China que me llaman la atención? Soy una española viviendo en Shanghái y, aunque he aprendido muchísimo sobre China y su gente, creo que casi cada día ¡ocurre algo que me sorprende! Nunca dejo de sorprenderme…

¡Hola de nuevo! Bienvenidos una vez más a mi blog Mesuenachino.
En la entrada de hoy os hablaré sobre algunos aspectos que, como española viviendo en China, han captado mi atención o incluso han hecho que me sienta algo perdida… Si no vives en China, no has conocido a ningún chino o no has hablado con nadie sobre cómo ha sido su experiencia en China, te invito a que leas esta entrada pues hay cosas que sin duda te llamarán la atención. Voy a escribir sobre esto en diferentes estradas, ya que son demasiadas experiencias… ¡Espero que os gusten!
Además, si quieres ver un video en el que Adriana de «Los 40 un cuento chino» y yo hablamos sobre ello pincha aquí: ver el vídeo
Cuando recién llegué a China estaba perdidísima. Nueva cultura, nuevas costumbres y estilo de vida a los que no estaba acostumbrada y que desconocía por completo. Supongo que si tienes pensado ir allí algún día o te encuentras ahora mismo allí puedes añadir más cosas a la lista o confirmar lo que te voy a decir.
1. Son bastante ruidosos. Vale, vale, lo sé. Quizá nosotros como españoles no nos quedemos cortos en el tema de ser ruidosos a mas no poder — sobre todo cuando estamos en un bar con los colegas, en el autobús, de fiesta, etc.— pero en China también lo son: en los mercadillos, en los lugares de refrigerio, podrás comprobarlo por tí mismo.
2. Al montar en el metro, en el autobús… el que no se da prisa no encuentra asiento. Como comprenderéis, con una densidad de población tan extensa “el que no corre, vuela”, o como se dice en mi pueblo (no sé si en otros lugares lo habéis escuchado alguna vez) “en cortijo grande, el que no corre se queda con hambre”. Así que intenta adaptarte lo más rápido posible— siempre con educación— y disfruta de la aventura. Y sé consciente también de que a veces puede parecerte injusto que lleves un buen rato en la cola del supermercado, en la parada de autobús, etc. (e incluso puedes llegar a perder los nervios) y llega un anciano o anciana haciendo rally y te adelanta en un momento. ¿¡Y qué le vas a decir!? Créeme cuando te digo que soy una persona con muy poca paciencia y algunas veces he acabado diciéndole: -¡Pero señora! ¡Qué estaba yo antes! Yao paidui (要排队), ¡A la cola!-y lo único que he conseguido es que o no me mire o me mire con una sonrisa… Gajes del oficio.
3.Todo el mundo (o casi) tiene una moto eléctrica. Para ir al trabajo, al colegio, a pasear… La usan para todo y da igual la edad que tengas (un niño claramente no). Son lo más conveniente si te quieres desplazar por allí de forma económica y rápida.
4. Pitidos de motos por todas partes. Algo que me parece super curioso es que, cuando acababa de llegar al país, trataba siempre de cumplir con todas las normas de seguridad posibles para no acabar atropellada. Como tienen sus carriles diferenciados (incluso tienen uno para este tipo de vehículos) no solía prestar atención a la carretera a no ser que quisiera cruzar. Pero un día de repente no pude no darme cuenta de que por alguna razón cada vez que pasaban a mi lado tocaban el claxon. De verdad que…¡No había día que no me acabara enfadando! Yo pensaba para mí: pero si tienen toda la calle para ellos, ¿¡para qué pitan!? Hasta que un día, una amiga china me dijo que es para avisarte de que tengas cuidado y que están pasando por tu lado. Y yo pensando que no tenían respeto ninguno y al final la culpa la tenía yo, je, je, je.
5. Cuatro en una moto. Lo que lees. Una vez me enteré de lo considerados que eran de avisarte cuando pasan por tu lado y, al ver que las carreteras están super bien controladas y divididas en carriles diferenciados, dejé de preocuparme por el tema de la conducción —y de mi salud por posibilidad de morir atropellada, dicho sea de paso—. Hasta que un día fui a visitar una ciudad pequeñita y de repente, desde el Didi en el que iba montada vi cuatro personas encima de la misma moto: padre, madre y sus dos hijos, considerando que se tratara de toda la familia.
6. Parece un país sin ley de tráfico. Dejando de un lado ya el tema del tráfico — que reconozco que soy muy pesada pero es que realmente me chocó bastante— he de deciros que…¡Cuidado! Se meten por todas partes, incluso por las aceras. Así que si eres de los que pasean por la calle escuchando música con los cascos presta mucha atención a este dato. Además, en las ciudades más pequeñas quizá puedas comprobar que los pasos de peatones muchas veces están de adorno… La gente cruza por medio de la calle, en ocasiones, vengan los coches que vengan. Como dice el refrán: “la multitud hace la fuerza”, ¿no?
7. Pero dentro de ese “caos” existe un orden. Quiero dejar claro que si estoy haciendo esto, ¡no es por criticar ni mucho menos! Al contrario. Son tips que quiero daros por si alguna vez decidís ir a China y vivir la experiencia por vosotros mismos, para que vayáis preparados para las posibles aventuras con las que os encontréis. A pesar de todo lo que ya he mencionado, he de decir que son pocos los accidentes que como viandante he presenciado. Cuando conducen parece que todo está en armonía, que siguen un perfecto orden y todo sigue su curso sin ningún contratiempo. Así que… como nosotros a primera instancia no sabemos cómo funciona ese orden ¡tenemos que estar alerta!
8. Los eructos. Sí, lo sé. Es un tema que quizá no es apropiado para esta entrada pero… Es bueno saberlo todo, ¿no? Para muchos el tirarse un eructo no es nada malo. Claro está que depende de la persona, de sus costumbres y de la situación en la que se encuentre (si es más formal o informal). Pero he de decir que ha habido ocasiones en las que, o bien en un restaurante, en la calle o incluso en clase ha habido alguien que se ha tirado alguno y me ha dejado bastante descolocada. Están acostumbrados y consideran que es algo normal y aceptado. Así que intenta que no te choque demasiado y trata de verlo más como algo cultural que como una falta de respeto. Todos tenemos nuestras cosas y hay gente de toda, ¿no te parece
9. La comida. ¡Qué levanten la mano todos aquellos a los que no les guste la comida china! Seguro que no sois muchos pues por lo general nos encanta a todos. La única cosilla que siento es que la comida de los restaurantes ¡está deliciosa! Pero no debemos abusar pues es bastante aceitosa y por tanto a la larga no muy buena para la salud… En su defensa he de decir que la comida que ellos suelen preparar en casa no tiene nada que ver, es mucho más saludable— salvo en ocasiones especiales—, así que no vayáis a juzgar la comida china sin tener en consideración este aspecto.
10. Existen más sabores que en España. Ya sea en helados, galletas, bebidas… encontrarás una diversidad de sabores inimaginables que sin duda querrás probar. Por experiencia he de decir que a veces me sorprenden bastante, unas para bien y otras para mal, todo hay que decirlo.
11. Les encanta el picante. Por lo general, muchísimos platos chinos son característicos por el picante. Si bien es cierto que hay muchas personas que no lo comen, hay que tener cuidado si no os gusta o no lo toleráis. ¡Antes de pedir preguntad al camarero!
12. Todos los chinos comen perro y todo tipo de animales. Seguro que muchos aún seguís teniendo esa idea o lo habéis escuchado alguna vez. Sí, los chinos suelen comer de todo: vísceras, riñones, patas de gallina, etc. Pero NO, no todos comen perro y animales de toda clase. Pasa igual que en España: ¿a caso nosotros no comemos sangre frita, callos, caracoles, conejo, hígado, etc.? Como dice el refrán español: “del cerdo se comen hasta los andares”. Pues lo mismo opinan ellos. Estaréis de acuerdo conmigo en que no podemos generalizar, ni en este ni en otros muchos aspectos.
13. Los chinos no suelen beber agua fría. Supongo que muchos sabréis que los chinos suelen beber agua caliente o incluso hirviendo. Como el agua no es potable, en su gran mayoría están acostumbrados a beber agua caliente— incluso si vais a un restaurante el agua que ponen gratis es agua caliente—. Un dato curioso es que, hablando con un conocido chino mío, me preguntó que cómo era posible que en España bebiéramos agua fría, que si no nos hacía daño en el estómago. Yo patidifusa no sabía como demostrarle que tanto en España como en la mayoría de los países de Europa el agua se suele beber fría. ¡Por no mencionar que en verano la bebemos casi congelada! Él seguía insistiendo que si el hecho de beber agua fría no nos provocaba problemas de digestión o estomacales. A partir de este hecho… ¿Quién pensáis que son los “raritos”? Yo personalmente creo que no son mas que diferencias culturales que debemos respetar y comprender.
14. Los termos de agua, indispensables. Debido a que el agua no es potable en China, podréis comprobar que en su mayoría siempre llevan un termo de agua, té o cualquier otra bebida allá donde vayan.
15. Se levantan muy temprano y se acuesta también bastante temprano. Si estáis estudiando chino seguro que conocéis esta expresión: zao shui zao qi (早睡早起), ‘acostarse temprano y levantarse temprano’. La gran mayoría sin duda son así. Arduos trabajadores y estudiantes que se levantan a las seis o siete de la mañana para comenzar sus tareas diarias y se acuestan a las nueve o diez para poder afrontar con fuerzas la próxima jornada laboral. Sin duda, como trabajadora en este país que soy, he de decir que este tipo de horario tiene sus ventajas, siendo incluso beneficioso para la salud (siempre que no se trabaje en exceso).
16. Les encanta echarse fotos. Sin duda son todos unos profesionales, tanto posando como haciendo las fotos. En todas partes, a todas horas. Yo he llegado a pensar que, tras ver a mis alumnas, son un tanto narcisistas :p ¡Todo el día en clase mirándose en el espejo! Hay una moda ahora y es que cada lugar 网红 (famosillo) recibe miles de visitas diarias con gente que quizá consume uno de sus productos solo con la intención de ¡hacerse la foto y subirla a internet! Es increible.
¡Y eso es todo! ¿Qué os parece? En esta ocasión he decidido añadir solo 16 puntos, pero he de deciros que tengo muchos más que compartiré más adelante con vosotros. Antes de todo decir que lo que he escrito es mi opinión, es subjetivo, como española viviendo en China. En ningún momento he tenido la intención de criticar esta maravillosa cultura ni, mucho menos, de hacer que alguien se sienta herido. Todo aquel que me conoce sabe que me apasiona la cultura china y siento un gran respeto hacia ellos. Simplemente son cosas que personalmente me llamaron la atención y me apetecía compartir con vosotros para que podamos compartir vivencias juntos, ¡si queréis! Os leo 🙂